El pirata farsante
Howell Davis, nació en Gales y murió durante la época dorada de la Piratería (1719). También conocido como Hywel, aunque otros le apodaban Davies. Pupilo del pirata irlandés Edward England. Se conocieron en el abordaje de su barco el «Carogan», este encuentro le cambió la vida. Convencido por Edward decidió unirse a los piratas. Pronto fascinó a England por sus habilidades y este le concedió la dirección del barco, en el que trabajaba anteriormente.
Aunque su carrera como pirata duró poco más de un año, capturó al menos 15 barcos, y realizó desde secuestros a venta de esclavos.
De carácter jovial y con don de gentes, que utilizaba para conseguir sus objetivos. En una ocasión se presentó en una compañía de inglesa, la África Royal, que tenía el monopolio de la extracción de oro en el Oeste de África. Sin embargo esta compañía obtenía más beneficios con el tráfico de esclavos . Se pasó por un corsario inglés y se ganó las simpatías de los dirigentes. Esto no tuvo que representarlo mucho tiempo, ya que secuestró al comandante y obtuvo un rescate por él.
En sus inicios, cuando disponía de poca gente y poco armamento, la fortuna le sonrió. Navegando en un buque que capturó, grande pero sin casi armamento, se tropezó con un barco francés. Utilizó una bandera negra pirata y le hizo creer que estaban a punto de ser abordados. El capitán del barco francés al ver el tamaño del barco pirata pensó erróneamente, que se enfrentaba a muchos, bien armados piratas. Al considerar que era inútil resistirse, se rindió.
Pero una vez le falló su palabrería y le costó la vida. Trató de engañar en la Isla de Príncipe. Se presentó ante el Gobernador portugués como un cazador de piratas, que recorría la zona. Lamentablemente para él, no le creyeron. Fue invitado a una cena en la residencia del gobernador. En el recorrido desde su barco a la residencia del Gobernador fue emboscado, muriendo en el acto.